La escasez de combustible golpea a Bolivia, continúan las largas filas en las estaciones de servicio

Los transportistas atribuyen la escasez de combustible a la falta de capacidad de pago del Gobierno a los proveedores de diésel y gasolina

El eje central del país se ve afectado debido a la escasez de combustible, pues las largas filas en los surtidores de carburantes continúan. Transportistas y conductores en general señalan que deben esperar muchas horas en las filas para conseguir combustible.

Red Uno, en su más reciente reporte señala que este martes, en la ciudad de La Paz, se puede ver una larga fila de vehículos en la estación de servicio de la avenida Montes. Los conductores señalaron a este medio de comunicación que esperaron durante toda la noche a la apertura del surtidor.

Ante esta situación, las personas llegaron a la estación de servicio con bidones, para comprar 5 litros de gasolina, el máximo permitido por día, además de eso, se debe acudir con una fotocopia de carnet de identidad.

Esta misma situación se repite en las demás estaciones de servicio de la urbe y en ciudades como El Alto, Cochabamba y Santa Cruz, donde también se reportan largas filas de choferes.

En ese sentido desde la Asociación de Surtidores (Asosur) de Santa Cruz informaron que el suministro diario de gasolina se redujo de 35 mil a solo 10 mil litros, lo que no abastece a la demanda en la ciudad cruceña.

Es así que, según esta institución, la falta de diésel afecta al transporte urbano y a los sectores productivos, entre ellos la agricultura y la industria, pues operan con combustible, que actualmente es escaso.

En ese sentido, desde Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) atribuyen esta situación a los bloqueos que se registran en las carreteras del país, aseguran que esta medida de presión retuvo más de mil cisternas de combustible.

Sin embargo, en contraparte, el dirigente del transporte pesado, Marcelo Cruz, señala que la escasez se debe a que el Gobierno se ha quedado sin crédito con los proveedores extranjeros, con lo cual el Estado ya no tiene el suficiente dinero cumplir con los proveedores de diésel y gasolina.