Nuevas denuncias salen a la luz en contra de dirigente de la Federación Universitaria Local (FUL)
Un exdirigente de la UMSA señala que las elecciones para los centros de estudiantes y cargos en la FUL están arreglados para favorecer a allegados de el presidente de la Confederación Universitaria Boliviana, Max Mendoza
Un exdirigente de la UMSA señala que las elecciones para los centros de estudiantes y cargos en la FUL están arreglados para favorecer a allegados de el presidente de la Confederación Universitaria Boliviana, Max Mendoza
Tras la muerte de cuatro mujeres y decenas de heridos en Potosí por el ataque con bombas de gas lacrimógeno en la Asamblea Estudiantil que se realizaba en la Universidad Autónoma Tomás Frías de Potosí, se comenzaron distintas investigaciones para dar con los encargados del fatal suceso y para conocer cómo se desarrolla la política en las universidades estatales.
Una vez más, salió a relucir el tema de los "eternos dirigentes" universitarios que lucran por varios años, llegando a décadas de ganar dinero por la política que se maneja dentro de las casas de estudio superior públicas.
La tarde de este miércoles surgió una nueva denuncia contra el máximo ejecutivo de la Federación Universitaria Local (FUL) de la Universidad Mayor de San Andrés (UMSA), Álvaro Q., que estaría ocupando el cargo desde hace más de cinco años y tendría 12 matrículas de inscripción por año.
Esta denuncia salió a la luz luego de que se revelara que el presidente de la Confederación Universitaria Boliviana (CUB), Max Mendoza, percibe más de 21.000 bolivianos al mes y que permanece como estudiante desde hace 33 años.
Estas denuncias avivan la polémica sobre los numerosos beneficios que gozan muchos líderes estudiantiles en las universidades públicas del país y que los mantiene atados al poder que no planean dejar por las comodidades que obtienen de él y la posibilidad del manejo de fondos destinados a los estudiantes, es decir, malversación de fondos.
Ismael Peralta, exejecutivo de la UMSA, explicó que en diferentes universidades del sistema existen dirigentes que tienen bastantes años en cargos como miembros de la Federación Universitaria Local (FUL) o en centros de estudiantes, los mismos que rotarían en el poder al ser allegados de Mendoza.
“Hay dirigentes en bastantes universidades (…) que son de bastantes años, están reelegidos y reelegidos, ¿qué quiere decir eso? Que cuando uno postula a ser FUL o algún centro ejecutivo, por más legal que entre, van a acreditar al perdedor porque están ligados a este señor (Max Mendoza)”, dijo Peralta.