Alertan de riesgos cardiovasculares por ayuno intermitente prolongado

La investigación fue publicada en las Sesiones Científicas 2024 sobre Estilo de Vida y Cardiometabolismo de Epidemiología. 

Actualización
Las personas que limitan los horarios de su alimentación se arriesgan a problemas de salud, si lo hacen prolongadamente. Foto: Pixabay
Las personas que limitan los horarios de su alimentación se arriesgan a problemas de salud, si lo hacen prolongadamente. Foto: Pixabay

La investigación fue publicada en las Sesiones Científicas 2024 sobre Estilo de Vida y Cardiometabolismo de Epidemiología. 

La moda del ayuno intermitente generó alerta en la comunidad médica y a través de un estudio alertan que esta forma de comer eleva en 91% las probabilidades del riesgo cardiovascular. 

Un estudio realizado con más de 20.000 adultos ha revelado que las personas que limitan su alimentación a menos de 8 horas tienen un 91% más probabilidades de morir de enfermedad cardiovascular en comparación con las que comen entre 12 y 16 horas al día.

"Restringir el tiempo diario de comida a un periodo corto, como 8 horas al día, se ha popularizado en los últimos años como una forma de perder peso y mejorar la salud del corazón" pero lo cierto es que "no se conocen los efectos a largo plazo", advierte Victor Wenze Zhong, autor principal del estudio y jefe de epidemiología de la Escuela de Medicina de la Universidad Jiao Tong de Shanghai, China.

Los resultados de esta investigación preliminar han sido presentados este lunes en las Sesiones Científicas 2024 sobre Estilo de Vida y Cardiometabolismo de Epidemiología y Prevención de la Asociación Americana del Corazón, una reunión anual que se celebra esta semana en Chicago y en la que se van a presentar los últimos estudios sobre salud, bienestar y estilo de vida.

El análisis encontró que los que se alimentaban en menos de 8 horas al día tenían un 91% más de riesgo de muerte por enfermedad cardiovascular y también observó un mayor riesgo de muerte cardiovascular en las personas que padecían una enfermedad cardíaca o cáncer.

Entre las personas con enfermedades cardiovasculares, una duración de la alimentación inferior a 10 horas al día se asoció con un 66% más de riesgo de muerte por enfermedad cardíaca o ictus.

Por el contrario, la restricción horaria no redujo el riesgo global de muerte por ninguna causa, mientras que la alimentación superior a 16 horas diarias se asoció a un menor riesgo de mortalidad en las personas con cáncer.

"Nos sorprendió descubrir que los que seguían un horario de alimentación restringido a 8 horas tenían más probabilidades de morir de enfermedades cardiovasculares", reconoce Zhong.