Expertos revelan los mejores tejidos para elaborar un tapabocas

Desde el anuncio de la reciente pandemia del COVID-19, mucho se ha hablado sobre el uso de las mascarillas como forma de protegerse del virus, pues lo que antes se consideraba como innecesario para las personas sanas y de uso único para los infectados, hoy ha pasado a ser necesario para todas las personas, con el fin de evitar contagiarse.

Por esta razón, muchas personas han optado por elaborar sus propios tapabocas para evitar el gasto frecuente al comprarlos; el problema radica en que no todos los materiales resultan ser efectivos, y algunos pueden llegar a ser completamente inútiles, pues permiten el paso de fluidos fácilmente.

Para evitar este tipo de situaciones en las que dichos individuos estén expuestos al utilizar cualquier tipo de tejido, la ingeniera textil María Neira, directora del Laboratorio de Investigación y Control de Calidad en Textiles, Cuero y Calzado (Lictex), compartió con el diario La Tercera un estudio realizado por ingenieros y analistas químicos de esta misma compañía sobre los mejores materiales para elaborar tapabocas.

Los tapabocas deben ser de un material que no permita filtraciones. Foto: Pixabay

Los resultados 

Con las pruebas realizadas se buscaba determinar la porosidad de las telas y su efectividad al detener el paso del virus, llegando a la conclusión que la ideal es la ‘tela no tejida’, aquella en la que no se evidencia la presencia de hilos sino que, por el contrario, está completamente prensado, paralelizado y que se compacta fácilmente por los tratamientos químicos a los que es sometido. 

“Hay un gran grupo de fibras que van enmarañadas unas con otras y no son paralelas, por lo tanto, van cubriendo los poros. Ese tipo de tela llega a tener una porosidad de alrededor de una a cuatro micras de poro promedio (una micra es la décima de un milímetro)”, comentó Neira.

Para reconocer este tipo de tela solo basta con fijarse en que no se deshilacha, por ende, no se puede llegar a desarmar; de hecho, esta es la utilizada en las bolsas que utilizan las empresas que son hechas de polipropileno. 

La tela que se deshilacha no es recomendable. Foto: Pixabay

En este orden de ideas, la tela ideal para una mascarilla elaborada en casa sería aquella a la que comúnmente se le conoce como ‘tela galleta’, teniendo en cuenta que es de un solo uso al ser desechable; su reutilización podría darse si se siguen algunas reglas de higiene como su lavado frecuente y su desinfección, rociándola con alcohol.

Ten en cuenta que cuando elabores tu propia mascarilla, lo importante es que le hagas una respectiva prueba de seguridad para verificar su efectividad y que no vayas a correr el riesgo de infectarte al estar expuesto. Para ello, solo debes rociarla con un aerosol y verificar que no se filtre.