¿Verdad o mentira? 6 mitos sobre la salud que han pasado de generación en generación
Con el paso de los años son muchos los mitos que se han creado sobre la salud, que han pasado de una generación a otra; aquí te contamos cuáles son ciertos y cuáles no.
Con el paso de los años son muchos los mitos que se han creado sobre la salud, que han pasado de una generación a otra; aquí te contamos cuáles son ciertos y cuáles no.
Cuando somos pequeños, nuestros padres, abuelos y/ familiares mayores, nos aconsejan sobre temas relacionados a la salud. Es común escuchar: "hay que reposar antes de meterse a la piscina", "no abra la nevera si está acalorado", entre otras.
Sin embargo, en la mayoría de los casos y con el paso de los años, se ha hecho caso a estos mitos y han terminado pasando de generación en generación, sin verificar si son verdad o no. Es por eso que, a continuación, con ayuda de algunos expertos, identificaremos cuáles mitos son ciertos y cuáles no lo son.
1. "Nadar después de comer es peligroso"
Parcialmente falso. Se piensa que si se nada después de comer, pueden producirse dolorosos calambres que impidan el movimiento adecuado del cuerpo y, por ende, se aumente el riesgo de ahogarse. Sin embargo, es importante tener en cuenta que los calambres aparecen por realizar un esfuerzo excesivo al nadar.
Al respecto, la doctora y reumatóloga, María José Janiot, menciona "lo que sí puede pasar es que se produzcan náuseas y se afecte la calidad de la digestión. Esto debido a que el organismo entra en el llamado reflejo de buceo, en el cual se priorizan los órganos críticos cuando el cuerpo, y sobre todo la cara, entra en contacto con el agua. Como consecuencia, deja sin oxígeno a otros órganos".
2. "Ver de cerca la televisión, daña los ojos"
Falso. Ver de cerca televisión o alguna otra pantalla no causa daños a los ojos, ni genera defectos como la miopía, estigmatismo o hipermetropía, debido a que estas enfermedades tienen un componente genético. De acuerdo con la doctora oftalmóloga Martha Medina, "es probable que la razón por la que alguien vea la televisión muy de cerca sea porque ya es miope y tiene un problema de refracción, entonces acercarse a las pantallas sería una consecuencia de la miopía, y no al revés".
Es fundamental tener en cuenta que una exposición larga y prolongada a las pantallas podría ocasionar fatiga ocular.
3. "No abra la nevera si está acalorado, se va a torcer"
Verdadero. Los cambios bruscos de temperatura, además de dolores articulares en los músculos del cuerpo, podrían ocasionar una compresión neurológica en el nervio facial y una condición conocida como parálisis de Bell. Esta genera adormecimiento detrás del oído y en las mejillas y pérdida de sensibilidad en los labios. Al cabo de 24 horas, es posible que la persona no pueda cerrar un ojo o articular palabras. Aunque se trata de una condición que sana sola en algunos días, es esencial consultar con un especialista para asegurar que esta no se haya dado por otra causa grave.
4. "Consumir carnes rojas produce artritis"
Parcialmente falso. La artritis es una inflamación en las articulaciones que genera dolor y rigidez en estas. Las causas de esta enfermedad son muchas y, según la doctora Janiot, no hay un vínculo entre esta patología y el consumo de carne. Sin embargo, la gota es un tipo de artritis que se da por la acumulación de ácido úrico, el cual está asociado a la descomposición de sustancias producidas por el cuerpo y presentes en alimentos como las carnes, los fríjoles, la cerveza, entre otros. Para este caso, se recomienda disminuir el consumo de dichos productos.
5. "El niño se descuajó"
Falso. Es común escuchar que cuando un bebé se cae o es alzado inadecuadamente se puede "descuajar", es decir, tener diarrea y dolor en el estómago debido a que una parte del intestino se descuelga. Sin embargo, lo que probablemente origina estos malestares es una infección producida por un virus, lo cual es frecuente en los menores. Es importante tener en cuenta que, si una diarrea se extiende por más de siete días, es fundamental acudir al especialista, principalmente si se presenta sangre o moco en las heces.
6. "Sentarse después de hacer ejercicio causa riesgo de infarto"
Falso. Sentarse o acostarse luego de terminar un ejercicio de manera súbita, no causa ataques cardíacos ni problemas cardiovasculares. Sin embargo, sí es necesario permitir que el cuerpo tenga un enfriamiento progresivo para evitar el desequilibrio entre la presión arterial y la frecuencia cardíaca y respiratoria. En casos extremos, dicho desequilibrio podría ocasionar desmayos.