El Salar de Uyuni recibe miles de turistas por Año Nuevo
Tres puntos del Salar de Uyuni son los más atractivos para los turistas en estas festividades de Año Nuevo.
Tres puntos del Salar de Uyuni son los más atractivos para los turistas en estas festividades de Año Nuevo.
El desierto de sal más grande y alto del mundo, el Salar de Uyuni, sigue siendo uno de los destinos favoritos para recibir el Año Nuevo, así lo confirman los guías de turismo de la región que aseguran que es la mejor temporada para viajar.
"La sal se asienta en el suelo en la época seca y el desierto se torna blanco y parece cubierto por nieve", precisó Anastasio, un guía de turismo de Potosí. Mientras aseguraba que los viajeros aprovechan para tomar fotos y videos en el atardecer.
Al desierto solo se puede acceder con vehículos todoterreno, y en sus orillas están los hoteles construidos con bloques de sal y un parque con esculturas de sal, uno de los sitios preferidos de los turistas, según el guía.
Colchani, una pequeña población con escultores y recolectores artesanales de sal, está en la entrada del desierto, ahí funciona la fábrica de sal más grande de la región, y se estima que extrae más de 20.000 toneladas del mineral al año, en su mayoría para consumo humano.
Otro sitio predilecto por los turistas es el "Cementerio de trenes" de Uyuni, en donde decenas de locomotoras del siglo pasado se oxidan abandonadas a la intemperie.
Los pobladores afirman que en esa localidad se construyó la primera línea ferroviaria de Bolivia durante la bonanza industrial de la región en 1889.
En la actualidad los trenes y sus vagones están abandonados, pero los visitantes los aprecian y se toman fotografías encima de las estructuras. El fenómeno favorito de los turistas es el "efecto espejo", que se crea en la época lluviosa del año, aunque en este diciembre ha llovido poco y los visitantes no han podido disfrutarlo.
Uno de los atractivos del lugar son las fotografías ilusorias. Con un juego de perspectivas por el horizonte que parece "infinito" los turistas se toman fotografías con dinosaurios o llamas de juguete, "el juguete se ve grande y las personas pequeñas, parecen que los están montando", puntualizó Anastasio.