Por: Juan Carlos García Sierra • Bolivia.com

9 destinos poco conocidos de Bolivia para visitar después de la pandemia

Hoy queremos mostrarte esos destinos poco conocidos que valen la pena conocer, y que después de que la pandemia se convertirán en maravillosos centros de admiración.

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Desierto en el Cañón del Inca y la Quebrada Palmira, cerca de Tupiza, Bolivia. Foto: Shutterstock
Desierto en el Cañón del Inca y la Quebrada Palmira, cerca de Tupiza, Bolivia. Foto: Shutterstock

Hoy queremos mostrarte esos destinos poco conocidos que valen la pena conocer, y que después de que la pandemia se convertirán en maravillosos centros de admiración.

Viajar, recorrer y disfrutar de la geografía del mundo es una pasión que ha tenido que ser reservada para próximos tiempos debido a la emergencia sanitaria que atravesamos desde hace meses.

Muchos amantes de la emoción y la aventura guardan sus fuerzas para que ojalá en poco tiempo, puedan dar rienda suelta a esa que es la razón de su vida, conocer nuevos destinos, y lógicamente Bolivia aparece en el radar gracias a su belleza y a su importante potencial turístico que anhela con ansias recibir miles y miles de visitantes de todos los rincones del orbe.

Contamos con destinos realmente exóticos y hermosos, algunos se han convertido en referencia obligada para el turista, pero hoy queremos mostrarte esos destinos poco conocidos que valen la pena conocer, y que después de que la pandemia sea derrotada, se convertirán en maravillosos centros de admiración de la belleza boliviana.

1. La Chiquitanía

Esta región de extrema calma y paz entre Santa Cruz de la Sierra y Brasil, y entre el Chaco y la Amazonía, es un lugar ideal para la contemplación de su extensa llanura y riqueza natural.

2. Trinidad

Esta es la puerta a la Amazonía y allí con un clima selvático, el calor humano de sus gentes y su gastronomía se convierte en una magnífica opción para conocer la otra cara turística de Bolivia.

3. Yanacachi

Es un lugar con pocos habitantes, pero con una calma que inspira verdadera paz espiritual. Este lugar ofrece de día brumas como de película y en las noches frescura, es un destino que enamora a los aventureros que desean calma en medio de la emoción.

4. Trópico de Cochabamba

Este es el reino de la vegetación y el agua, la exuberante vegetación y sus ríos y lagunas son un magnético elemento que invita a los amantes de la aventura a adentrase en su territorio.

5. Tarija

Muy cerca de Argentina y con un carácter colonial español, esta población de calles limpias y gente cálida es un elemento del turismo boliviano digno de conocer y admirar, en cualquiera de sus calles y mercados se puede disfrutar de los ricos frutos de su tierra y su arquitectura antigua es realmente bella.

6. Valle de los Cinti

Para quienes aman el vino y la buena comida, este es el lugar elegido. En el Valle de los Cinti todo es agradable y un auténtico placer, la comida, el clima, los viñedos y su gente amable y hospitalaria hacen de este lugar una visita inaplazable. 

7. Samaipata

A pesar de ser declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, este paraje de ensueño no es de los más conocidos de Bolivia. Su carácter montañoso y sus piedras esculpidas hacen de este lugar un destino de especial atractivo y digno de conocer y disfrutar.

8. Parque Nacional Madidi

Esta es una reserva forestal de belleza única en donde la exuberancia natural tiene sus dominios. Es considerada como una de las zonas de mayor biodiversidad en el mundo, razón que la hace merecedora de visita, admiración y protección.

9. Tupiza

Su biodiversidad, desfiladeros rocosos y cercanía con Argentina, hacen de este destino, una potencia para desarrollar turísticamente. Este lugar es fiel representante de la variada riqueza boliviana que no puede permanecer oculta y debe ser un placentero descubrimiento para el mundo.

Estos son solo algunos de los destinos desconocidos de la belleza boliviana, una tierra de enorme riqueza y potencial que, por fortuna, ya muchos se encargan de hacerles eco en todos los puntos cardinales del planeta. Visitar y recorrer Bolivia debe ser un propósito para celebrar que la pandemia ha llegado a su fin.