Por: Micaela Sanjines Ordóñez • Bolivia.com

Investigación de la NASA provocó que una mujer y un delfín se enamoren

En el año 1960, Margaret Howe, ingresa al proyecto para lograr que los delfines aprendan a comunicarse con los humanos, sin embargo uno de ellos se enamoró de Margaret.

Actualización
Fueron en total 6 días los que bastaron para enamorarse. Foto: Youtube BBC
Fueron en total 6 días los que bastaron para enamorarse. Foto: Youtube BBC

En el año 1960, Margaret Howe, ingresa al proyecto para lograr que los delfines aprendan a comunicarse con los humanos, sin embargo uno de ellos se enamoró de Margaret.

Margaret How Lovatt, era parte de un proyecto para lograr que tres delfines hablaran o al menos reconocieran el habla humana. Sin embargo, la mujer y uno de los delfines del experimento se enamoraron. El proyecto dio inicio gracias al polémico neurocientífico John C. Lilly, quien en su libro Man and Dolphin publicado en 1961, resaltó la hipótesis de que los delfines deseaban (y probablemente podrían) comunicarse con los humanos.

El astrónomo Frank Drake, había iniciado en 1960 el Proyecto Ozma, un experimento de búsqueda de vida extraterrestre a través de ondas de radio interestelares. Es así que cuando Drake leyó el libro de Lilly, se entusiasmó por sus semejanzas entre su propio trabajo y el de Lilly. Drake ayudó al neurocientífico a obtener fondos de la NASA para que pudiera demostrar su hipótesis sobre un canal de comunicación entre humanos y delfines.

Poco después, Lilly instaló un laboratorio donde Margaret Howe Lovatt de 23 años participó en los experimentos. Lovatt comenzó a dedicar su tiempo completamente al proyecto de Lilly. 

Dentro de este proyecto, se utilizaron tres delfines macho y dos hembras. El más joven de estos llevaba por nombre Peter y el director de la investigación notó que tenía un cerebro especialmente bien desarrollado, por lo que tenía confianza en que este pudiera completar el objetivo de la investigación.

Sin embargo, las interacciones que Peter con Margaret revelaron que los delfines podían desarrollar otro tipo de actividades que no eran del habla. El delfín se había enamorado de la humana. 

Luego de seis meses, Margaret solo respondía a Peter y no mostraba interés en el desarrollo o la investigación de los demás delfines. Esta cercanía que desarrolló con Peter siguió expandiéndose y con el tiempo llegó a ser una relación, en sus propias palabras, íntima. 

Dejando salir sus instintos Peter empezó a cortejar a la mujer primero tenía acercamientos con sus pies y muslos, posteriormente se sintió atraído por el cuerpo de la mujer y buscaba satisfacer sus deseos sexuales. En función del experimento, Margaret accedió a masturbar el cetáceo, sin embargo, asegura que no tenía atracción sexual por Peter, aunque sí sentía que había mucha sensualidad entre ambos.

“Peter estaba madurando sexualmente y era un poco travieso. Esa relación de tener que estar juntos se convirtió en disfrutar realmente de estar juntos, y querer estar juntos, y extrañarlo cuando él no estaba allí", dijo la mujer a la BBC.

A pesar de que para Margaret Howe Lovatt el estudio estaba siendo satisfactorio, los investigadores de la NASA comenzaron a querer llevarlo más lejos, experimentando con LSD, por lo que la investigación se detuvo.

Peter fue trasladado a un laboratorio en Miami, y poco después de este hecho Margaret recibió la noticia del suicidio de Peter luego de mantenerse en cautiverio y de que se le realizaran más experimentos.