Científicos encuentran la clave de la inmortalidad en una medusa

La Turritopsis dohrnii, es una medusa transparente y diminuta, a penas llega a medir siete milímetros. No posee corazón ni cerebro, pero este ser tiene la capacidad de vivir para siempre. Vive en las aguas del Mediterráneo y es la única especie de la que tenemos conocimiento que posea la inmortalidad.

Todas las especies que habitan este planeta pasan por diferentes etapas en su vida, una de ellas es el envejecimiento que finalmente nos lleva a la muerte, sin embargo, esta medusa tiene la capacidad de rejuvenecer.

El ciclo de su vida se asemeja al de una mariposa, pero en vez de morir tras convertirse en un ser adulto, cambia su forma de nuevo. Esto se convierte en un ciclo que no tiene fin y que desafía a todo lo preestablecido por nuestra naturaleza. Pero hay que recalcar, que estas medusas si llegan a la muerte, pero en manos de sus depredadores.

La capacidad de esta medusa para rejuvenecer llamó la atención de los investigadores pero no solo para hallar soluciones al envejecimiento humano, sino porque se trata de un organismo fascinante, con la capacidad de alterar su propio ciclo de vida.

Una investigación publicada en la revista ‘Proceedings’ reveló los secretos genéticos de la medusa. El equipo de investigadores dirigidos por Carlos López-Otín de la Universidad de Oviedo comparó la genética de una medusa muy parecida con la Turritopsis dorhmii y lograron identificar genes diferentes o amplificados en esta especie inmortal.

Tras su comparación con la medusa T.Rubra, el resultado principal ha revelado que las principales diferencias se han encontrado en varios aspectos como los genes asociados con la replicación y la reparación del ADN, el mantenimiento de los telómeros, la renovación de las células madre, la reducción del ambiente celular oxidativo y la comunicación intercelular.

Estos genes identificados están estrechamente relacionados con el envejecimiento saludable y la longevidad, que durante muchos años los seres humanos han buscado sin descanso. Sin embargo, no existe un ingrediente o una única clave para la inmortalidad es más bien una coordinación entre todos los mecanismos de la medusa.

“Lo que hace especial a este animal es la sinergia de todos esos cambios, que hacen que esta medusa pueda rejuvenecer. Si se producía un cambio genético durante la reversión, debería ser por algo importante” dice la investigación.

Pero según López-Otín este trabajo no busca la anhelada inmortalidad del hombre, sino mas bien entender las claves y las razones por las que algunos seres como este logran combatir con el envejecimiento o las enfermedades relacionadas con este.